Navidad: 10 lugares comunes de la fecha, pero que nos encantan

Año  tras año, en Nochebuena y Navidad , nos juntamos con  la familia a festejar y a pasar un buen momento. Aunque la gente crece, algunos integrantes ya no están o se suman nuevos, siempre ocurren las mismas cosas.


A continuación, hacemos un repaso por las situaciones que se repiten año tras año, pero que hacen de las Fiestas un clásico y esperamos que vos nos cuentes si en tu familia pasa lo mismo.

Vitel Toné y ensalada  rusa para todos: siempre las mismas comidas. A todos nos encantan, pero, ¿no se puede comer eso otro día que no sea Navidad o Año nuevo? ¿Por qué esperar doce meses?

¿Ya son las 12.00?: Los más chicos sólo quieren que sea medianoche para abrir los regalos que Papá Noel les trajo. Por eso, los mata la ansiedad y desde que comienza la cena hasta que efectivamente es la hora de abrir los paquetes, preguntan unas 189.457 veces si es o no el momento. Además, siendo chico sucede que custodias el árbol de Navidad a sol y a sombra para descubrir a Papá Noel, sin embargo, basta con pestañear para que él llegue sin que lo veas.

Medias y desodorante de regalo para los chicos: es el clásico regalo de las abuelas. Aunque siempre se repiten, lo hacen con la mejor intención y todo el amor del mundo.

Ropa interior rosa para las chicas: para estrenar el 31 de diciembre y atraer la suerte para el año siguiente. Otro clásico regalo de las abuelas.

Pan dulce con frutas, sin frutas:  nunca falta el que no se resigna y come pan dulce, pero que como no le gustan las frutas abrillantadas, las saca con la mano y las deja en la servilleta. Básicamente, le saca al dulce su única gracias. ¿Para qué insiste si no le gusta? ¿por qué no come otra cosa?

¡Comí mucho, no puedo más!: es una de las frases más repetidas después de "Feliz Navidad". Sin embargo, minutos después,  volvemos a comer como si nunca hubiéramos dicho nada. Total, la dieta se empieza el 2 de enero.

La lucha del hombre contra la tecnología: mandar mensajes de texto o hablar por celular, en estas fechas se vuelve una misión imposible. Así que, mandá tus saludos antes o el día después. ¿Habrá que volver a la paloma mensajera?

Son 12.30, ¡me quiero ir!: siempre pasa lo mismo con los jóvenes de la familia. Esperan el brindis para irse con los amigos y festejar por su lado. El problema, es cuando estás lejos de casa y para juntarte con tus amigos dependes de que alguien te lleve en auto. ¡Fuiste!

El que se fue de copas: diversión asegurada. En todas las familias hay algún tío o primo que sin darse cuenta toma demás y se pone jocoso, canta, cuenta chistes y entretiene a  todos.

25 de diciembre y 1° de enero... lo que quedó de ayer: no importa si estos días sigue la reunión familiar o no. Nadie cocina y como la noche anterior hubo comida, se come lo que sobro... ¡pero qué sobras!

Estas son algunas de las cosas que suelen pasar en las Fiestas en varias familias y que aunque son predecibles, nos encantan y queremos que así sigan siendo.
No importa si tu familia es chica o  numerosa, no importan las edades, seguro viviste alguno de éstos puntos.

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